Tecnologías para conservar la nieve
Una de las soluciones tecnológicas más extendidas es la producción de nieve artificial. Aunque esta práctica ya lleva décadas, los avances recientes han mejorado su eficiencia y reducido su impacto ambiental. Por ejemplo, se están utilizando sistemas de nieve artificial que consumen menos agua y energía, como los cañones de última generación que optimizan las condiciones para fabricar nieve solo cuando es absolutamente necesario.
Pero no todo queda en los cañones. Algunas estaciones están apostando por el almacenamiento de nieve de temporadas anteriores. Esto se hace cubriendo grandes cantidades de nieve con materiales especiales que la protegen del calor y la radiación solar, permitiendo reutilizarla en la temporada siguiente. Una idea simple, pero efectiva.